Ayer escuché a Alfonso Guerra decir eso del Señor Gómez y la Señorita Trini, y confieso que me sorprendió, pero no me molestó. De hecho me sacó una sonrisa porque me pareció un lapsus políticamente incorrecto de un señor ya "mayor", de otra época.
Lo que me ha sorprendido mucho más ha sido el revuelo que se ha armado (aquí), y la rectificación posterior que ha tenido que hacer (aquí), porque creo que estamos sacando las cosas de quicio.
El comentario de Beatriz Corredor, "en el PSOE no hay señoritos ni señoritas sino compañeros y compañeras y ministros y ministras", me parece que refleja el grado de radicalidad al que se ha llegado.
¿Por qué nos empeñamos en ver algo malo en utilizar "ministro" para todo el mundo? Como conté hace tiempo en este post, no soporto esa distinción continua y políticamente correcta de "compañeros y compañeras", "diputadas y diputados", etc, etc, etc. Me parece una muestra de feminismo mal entendido que sólo perjudica a las mujeres.
Lo dicho ayer, vamos hacia atrás...